7 de julio de 2022

LA HIPERTROFIA CARDÍACA Y SUS DOS CARAS: ¿DIFERENCIAS IRRECONCILIABLES?

Dra. IRENE LUCIA ENNIS, Prof. Titular Fisiología y Física Biológica, Investigadora Independiente CONICET, Jefa del Departamento de Ciencias Fisiológicas, Directora de la Carrera de Doctorado. Facultad de Ciencias Médicas, UNLP, Centro de Investigaciones Cardiovasculares "Dr. Horacio E. Cingolani" CIC-CONICET-UNLP.

Información de la línea de investigación: http://sedici.unlp.edu.ar/handle/10915/87262

Resumen del seminario
Las enfermedades cardiovasculares, entre ellas la hipertrofia cardíaca patológica, constituyen un serio problema de salud pública por su elevada morbimortalidad, además de los altos costos en salud que conllevan su diagnóstico y tratamiento. Representan la causa más frecuente de muerte en el mundo actual y lo que resulta aún más preocupante es que se prevé que la mortalidad de este origen se incremente en los próximos años. Sin embargo, existe otra forma de hipertrofia cardíaca, la fisiológica, con una evolución y pronóstico diametralmente opuestos.

Resultados discutidos
• En el modelo animal de ratas espontáneamente hipertensas (SHR) tratadas con inhibidores farmacológicos de la isoforma 1 del intercambiador sodio/hidrógeno (NHE-1) no se evidenciaron cambios significativos en la presión arterial a los 30 días de tratamiento, sin embargo, la inhibición de NHE-1 normalizó los parámetros de hipertrofia cardíaca (relación entre el peso biventricular y el peso corporal) y la expresión de marcadores de hipertrofia patológica como el péptido natriurético cerebral (BNP). Con respecto a la contractilidad, se observó que el tratamiento no deterioró los parámetros en la ecocardiografía.
• Se realizó un silenciamiento específico de NHE1 en SHR adultas, con el lentivirus (L-shNHE1, que codifica un ARN de interferencia pequeño específico) en la pared del ventrículo izquierdo (LV). 30 días después de la inyección del lentivirus, se observó una regresión de la hipertrofia cardíaca, evidenciada por una disminución en la expresión de la proteína NHE-1 (53,3 ± 3% en el VI del L-shNHE1 en comparación con el grupo control inyectado con L-shSCR).
• Se indujo otro modelo de hipertrofia cardíaca gracias a la administración continua de Angiotensina II (ANGII) a ratas Wistar. Esto aumentó la actividad de la NADPH oxidasa miocárdica, pero la inyección de l-shNHE1 evitó el estrés oxidativo, como lo reveló la normalización de la peroxidación lipídica. Estos resultados permiten proponer el silenciamiento parcial del NHE-1 cardíaco a través de la inyección con un lentivirus como una herramienta prometedora en la prevención de la hipertrofia cardíaca inducida por ANGII.
• Para inducir la hipertrofia cardíaca fisiológica, se empleó un modelo de entrenamiento físico llamado “voluntary wheel running”, donde el ratón corre de forma voluntaria durante la noche. Se observó que el entrenamiento promovía el desarrollo de hipertrofia cardíaca fisiológica (relación peso del corazón/longitud de la tibia, contenido de colágeno intersticial, y área transversal de los cardiomiocitos). Además, la actividad de NBCe1 (isoforma electrogénica del cotransportador de bicarbonato de sodio cardíaco) aumentó significativamente en cardiomiocitos aislados de ratones entrenados, y esto es una consecuencia cardiovascular benéfica del entrenamiento físico.
• La administración del factor de crecimiento insulínico tipo 1 (IGF-1) evita la hiperactividad del NHE-1 miocárdico, induce un efecto ionotrópico positivo y relajante en el miocardio hipertrófico. Además, induce un efecto antioxidante en el miocardio hipertrófico. En conclusión, el entrenamiento físico o la administración de IGF-1 provoca del fenotipo patológico al fisiológico.
• Se evidenció un beneficio sobre la dinámica y funcionalidad mitocondrial, eliminándose posiblemente las mitocondrias disfuncionales y generando nuevas. Además, se detectó un reordenamiento de la disposición mitocondrias/sarcómeros. La mejoría a nivel del fenotipo mitocondrial también se manifestó por un aumento en la polaridad de la matriz, en la actividad de la Citrato Sintata (CS) y del contenido intramitocondrial de CytC.

Relevancia Patológica
• La hipertrofia cardíaca es un factor de riesgo independiente, que a menudo progresa al desarrollo de insuficiencia cardíaca y muerte del individuo.
• Evitar o revertir el desarrollo de hipertrofia cardíaca mejora la función cardíaca y el pronóstico de vida en personas con esta patología.
• La hipertrofia cardíaca producida por una sobrecarga hemodinámica fisiológica preserva o mejora la contractilidad y no conlleva riesgos.
• La expresión crónica de shNHE1 en el corazón surge como una posible metodología para reducir la hipertrofia cardíaca patológica, evitando efectos potencialmente no deseados causados por una inhibición de NHE1 en todo el cuerpo.

Papers relevantes